jueves, 11 de junio de 2015

LA ATENCIÓN DE LOS NIÑOS EN EL AULA

Por: Carola Pozo Cortez


 La atención representa nada más que el "clima interior" del niño que aprende y su capacidad de concentración.

Algunos padres y docentes suelen afirmar cuando se refieren a los aprendizajes de los niños que no asimilan en clase porque  "son distraídos, no se concentran o vuelan".

Este tipo de dificultad recae directamente en los aprendizajes, que exigen, a la hora de aprender, un peculiar grado de concentración.

Las razones de la "falta de atención" son heterogéneas. Generalmente, no atiende quien no "está estimulado" o atraído por la tarea.

Aclarando este punto, se puede afirmar que, los niños no suelen interesarse en las tareas, debido a que transportan problemas emocionales.

No atiende quien está, entre otras condiciones:

  •  aburrido de la clase
  •  mal comido
  •  maltratado dentro o fuera de la clase
  •  ofendido
  •  preocupado por situaciones familiares
  •  sin estímulo
  •  sin afecto
Y obviamente no atiende el verdadero disléxico quien, sumergido en su universo desorientado, no comprende qué ocurre con todo ese cosmos de la lecto - escritura y elige "volar".

En este tema de la inatención se destacan dos aspectos relevantes:

  1. La problemática emocional que puede bloquear total o parcialmente el interés y la atención de un niño frente al aprendizaje, mas particularmente el de la lecto - escritura, que, como sabemos, requiere una cuota importante de concentración. El niño que evade la tarea escolar utiliza todo tipo de mecanismos defensivos: negación, fuga por la fantasía, agresión y en general disociación.
  2. El problema orgánico, que se refiere específicamente a los niños lesionados cerebrales. 
William Cruickshank en su libro "El Niño con Daño Cerebral" sostiene:

"Este tipo de niños se distraen fácilmente por estímulos internos 
o externos, por lo que sus lapsos de atención pueden 
ser excesivamente cortos. 
En algunos casos este lapso no pasa de los 
90 segundos a dos minutos".

MEMORIA VISUAL, AUDITIVA Y MOTRIZ

Por: Carola Pozo Cortez

La memoria es una importante función que condiciona los procesos del aprendizaje y en particular el de la lecto - escritura. 

Para desarrollar un aprendizaje óptimo, es necesario asegurar, que el niño,  tenga una buena formación del universo orientado, que esta conformado por la:





Es importante señalar, sin embargo, que no es recomendable medir los aspectos de la memoria como funciones autónomas, ya que la capacidad de recordar o no sonidos, formas o movimientos, depende de otras funciones además de la memoria propiamente dicha, como la calidad de las percepciones, el interés del sujeto y primordialmente la atención.